Acaba la 15ª semana en el portal de la Consejera aragonesa de Educación.
Muchos
han sido hoy los que se han detenido ante el cartel del perroflauta motorizado,
los que han preguntado y comentado. Algunos arrojan toneladas de pesimismo.
Otros preguntan para recobrar algo de esperanza. Alguno incluso se preocupa por
la seguridad del perroflauta motorizado, confía con candor en que no acudan los policías
hasta el portal para hacerle daño (¿proyección de sus propias experiencias?).
El perroflauta motorizado, sin
embargo, ha estado vagando con la mente entre los días oscuros por venir. Desde
hace años está en juego el modo de vida, el estado de bienestar, el modelo de
educación, sanidad, trabajo y descanso de nuestro pueblo, pero la agenda de
movilizaciones para los próximos meses por la escuela pública y contra los
recortes lleva al desaliento. Piensa el perroflauta motorizado que apenas queda
ya tiempo para otra cosa que no sea la lucha incondicional, noviolenta, por que
no nos arrebaten nuestros derechos fundamentales. A este paso, vamos camino de
quedarnos sin nada. Necesitaba una música especial y ha venido en su auxilio
Gavin Bryars. Esto es una muestra de lo que ha estado escuchando el perroflauta
motorizado esta mañana:
El ministro Wert vendrá a Zaragoza
el 23 de septiembre, con el Príncipe Felipe, para inaugurar el curso
universitario. Wert compara las movilizaciones anunciadas para este otoño por
familias, estudiantes y sindicatos como “una fiesta de cumpleaños”. Por su
parte, la Plataforma Estatal por la Escuela Pública habla de un "otoño
caliente". De momento, está convocada para el 24 de octubre una huelga
general (de Infantil a Universidad) contra la reforma educativa de Wert. Una
huelga de un día, tras la cual la Administración informará del bajo seguimiento
de la misma y los convocantes hablarán de un seguimiento masivo. ¿Después…?
El día 23 de septiembre se está
organizando una protesta masiva del mundo educativo aragonés a la llegada al
Paraninfo zaragozano de Wert, el Príncipe, la Presidenta Rudi, la Consejera
Serrat, etc. ¿Después qué?
El 24 de octubre habrá transcurrido
más de un mes desde el inicio del curso 2013-2014. Con menos presupuesto, menos
profesorado, menos becas de comedor, menos becas de material escolar, menos
becas universitarias, más número de alumnos por aula, más exámenes de reválida,
más religión en las aulas, más políticas en favor de la enseñanza concertada,
mayor abandono de la escuela pública, menos igualdad real de oportunidades
reales… Sin embargo, el curso ha empezado plácidamente y seguramente la situación
de calma chicha seguirá igual hasta el anunciado día 24 de octubre. ¿Después…?
La Plataforma Estatal por la Escuela
Pública busca también organizar una campaña de firmas contra la LOMCE y los
recortes en Educación. Las firmas tuvieron éxito en el ámbito sanitario
madrileño contra la privatización de centros sanitarios o contra la
privatización del Canal Isabel II, también en Madrid. Por el contrario, las
firmas conseguidas por la ILP de Stop Desahucios y Plataforma Afectados
Hipoteca (PAH) se estrellaron contra la mayoría absoluta y la cerrazón
institucional del PP. ¿Qué va a ocurrir en el mundo de la enseñanza hasta la
consecución y entrega de esas firmas? ¿Y después?
Una huelga de un día sirve para muy
poco. Recuerdo una huelga que duró meses en el mundo educativo hacia mediados
de los 80 para conseguir la homologación del profesorado al resto del Cuerpo de
funcionarios. Gobernaba González y José María Maravall en Educación. Lo pagó
toda la ciudadanía, con sus niños y niñas en casa y los centros en huelga.
Finalmente, el poder cedió (no tuvo más remedio) y la ciudadanía ganó: desde
entonces, la enseñanza pública fue creciendo en dignidad, eficacia y servicio
al pueblo.
Me temo que el calendario de
movilizaciones anunciado por la Plataforma Estatal por la Escuela Pública será
ineficaz por apocado y poco contundente. No se trata solo de protestar (un día
o una semana…) contra los recortes y por la escuela pública, sino de luchar sin
tregua hasta conseguir la retirada de los recortes y unos presupuestos
suficientes para que la escuela pública cuente con profesorado, atención a la
diversidad, integración social, recursos, servicios, etc. más que suficientes
para llevar a efecto cumplidamente sus objetivos y obligaciones.
Sin embargo, esta sociedad, estos
dirigentes de sindicatos y organizaciones educativos son tan tibios, tan
nulamente resolutivos, que parecen organizar campañas cara a la opinión pública,
más que campañas combativas para alcanzar por las buenas o por las menos buenas
unos objetivos. Desgraciadamente, en el mundo de la educación y de la enseñanza
apelar a la lucha y el compromiso de tod@s por tod@s es una quimera.
Al término de la mañana, Venancio ha
subido hasta la estratosfera debido a la sorpresa y la felicidad que le han
invadido. Al parecer, una mano anónima ha depositado 50 euros en la cestita
donde los viandantes van dejando caer alguna moneda.
Hasta el próximo día.
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