miércoles, 31 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 43


Esta mañana, hacia las 10,33 horas, un hombre extraño, vestido de levita, se ha acercado al perroflauta motorizado, y le ha entregado un papel.
- hola, buenos días –ha dicho, a modo de saludo-.  Mi nombre es Lampe y vengo en nombre de mi señor Emmanuel Kant, a quien sirvo desde hace cuarenta años. Según me ha explicado, se trata de unos apuntes o breves notas sobre unas ideas básicas que Herr Kant nos ha legado sobre su concepción de la educación. Normalmente, parece muy enfrascado en sus altas lucubraciones metafísicas y éticas, pero doy fe de que también es un sencillo y atinado pensador sobre la formación de la juventud. Ha pergeñado estos apuntes de los que ahora le hago entrega, de forma casi telegráfica y quizá excesivamente libre en aras de su claridad.
- Muchas gracias –ha respondido el perroflauta-. Es todo un honor para mi.
- Mi señor Kant –añadió Lampe- me ha insistido también en que no deje usted de escuchar esta mañana In a Time Lapse, de Ludovico Einaudi. Está plenamente seguro de que le gustará.
- Lo haré, sin duda alguna –aseguró el perroflauta- Salude de mi parte a Herr Kant.

Lampe y su levita se iban perdiendo a lo lejos en la calle Alfonso, cuando ha llegado Laura, recién llegada de Manchester. Ha contado al perroflauta que, acabados sus estudios,  está estudiando la forma de presentar y llevar a cabo su proyecto de “neuropsicoeducación”, cuyas líneas fundamentales ha explicado al perroflauta. Mientras Laura hablaba, iba dibujándose en la mente del perroflauta la imagen de su hija Begoña, psicóloga, ahora por Méjico, tan inquieta y emprendedora en tantas cosas, también en temas de psicología social y comunitaria. Al final, el perroflauta hará de puente entre una y otra para que intercambien ideas y planes, si así les parece.
Después, el perroflauta motorizado ha leído (mejor, paladeado) el papel que le había dado poco antes Lampe, criado de Kant. Dice así:

* Enseñar en el periodo infantil y juvenil es especialmente difícil, porque cometemos el error de inculcar ideas y teorías sin esperar a que la inteligencia de es@s niñ@s y jóvenes haya madurado convenientemente.
* Ese error, pues, consiste en no respetar el orden natural del desarrollo afectivo y mental de l@s niñ@s y jóvenes.
* Las escuelas se dejan llevar por un montón de prejuicios, fomentados en un estado burgués muy refinado, por lo que las ideas se tornan instrumentos de progreso y la curiosidad natural acaban siendo un adorno y algo superfluo.
* Hay que concordar plenamente o al menos acomodar la enseñanza pública al natural desarrollo del alumnado, al progreso natural del conocimiento humano. Solo partiendo de conceptos y destrezas surgidos desde lo simple, intuitivo y los sentidos, será posible llegar a otras iteas y teorías más elaboradas y complejas.
* Un profesor debe formar ante todo desde las ideas sencillas y bien entendidas hasta la elaboración racional, sin pretender empezar la casa por el tejado. Si lo hace así, todo su alumnado quedará beneficiado, pues no tod@s tienen por qué llegar a sabi@s o grandes científic@s o intelectuales, pero así tod@s habrán llegado a ser más experimentados e inteligentes.
* De no hacerlo así, los supuestos conocimientos embutidos a su alumnado serán siempre algo exterior a él, prestados, pegados, adosados, pero no habrán nacido de él y en él. Su capacidad intelectual se habrá hecho mucho más estéril y falta de vida.
* Esta es la causa de que, frecuentemente, se tropieza uno con presuntos intelectuales y eruditos que muestran entender muy poco.  
* Por consiguiente, lo primero de todo es hacer madurar al entendimiento y fomentar su desarrollo, sobre la base de elaborar conocimientos bien entendidos y asimilados desde la experiencia y los sentidos.
* Tampoco hay que dar saltos artificiales a otros conocimientos porque así lo dictan los programas o los planes de estudio, sino llegar al siguiente paso a través del natural y desbrozado sendero de los conceptos más elementales que, paso a paso, le hacen progresar; pero todo de acuerdo con aquella capacidad del entendimiento que el previo ejercicio ha debido, necesariamente, producir en él.
* En una palabra,  No se debe enseñar pensamientos, sino enseñar a pensar.  Al alumno no hay que transportarle sino dirigirle, si es que tenemos la intención de que en el futuro sea capaz de caminar por sí mismo.
M. Immanuel Kant, Nachricht von der Einrichtung seiner Vorlesungen in dem Winterhalbenjahre von 1765-1766.

“Esto lo he leído ya hace unos años en el libro de E. Lledó, Ser quien eres”, se ha dicho con sorpresa el perroflauta. Se sentía bien. El piano de Einaudi acariciaba su espíritu.
Una señora que pasaba por allí interpretó que el perro del perroflauta había marcado territorio en aquel portal de la calle Alfonso, pero en realidad es el propio perroflauta quien había formado con su emoción aquel pequeño reguero de lágrimas, de tan feliz que se sentía.
Hasta mañana.



martes, 30 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 42

Días familiares, especialmente por la estancia de mi hermano Guillermo hasta hoy. Por eso, Tino, no hubo ayer Diario de perroflauta motorizado (estaba demasiado cansado hasta para escribir algo). Un fuerte abrazo que llegue raudo hasta tu Asturias.
Ayer y hoy han seguido desfilando durante dos horas diarias gente y más gente por la cale Alfonso I, la mayoría mirando solo de soslayo al perroflauta. Se acercan también hasta el portal algunas personas conocidas con una sonrisa de oreja a oreja por sus vacaciones recién estrenadas. Otras cuentan historias que indignan y entristecen a la vez: hoy mismo, una profesora de Zaragoza en un colegio público bilingüe de francés con un panorama muy oscuro debido a los recortes y una investigadora en la Universidad que ha tenido que largarse a la empresa privada debido también a los recortes. El perroflauta acaba un poco más hundido en su silla cada vez que le cuentan historias de ese estilo. ¿Hasta cuándo? ¿Hasta cuándo? Proletarier aller Länder, vereinigt euch! ¡Proletarios de todos los países y lugares del mundo, uníos!
Rajoy habla el jueves en el Parlamento, pero será en vano. Se montará el espectáculo archiconocido de reproches mutuos y discursos falaces, y se irán de vacaciones. El sistema funciona a base de todo este circo. ¿Cuándo nos cercioraremos finalmente de que la solución pasa por cuestionar radicalmente, superar el sistema? El país entero está de vacaciones. Incluso los desempleados están de vacaciones. Ese mismo país, recluido en la UCI y apenas sin (querer) salir de la anestesia, espera que escampe pronto, que todo acabará siendo una pesadilla y lloverán las soluciones del cielo. El país parece no haber salido de la infancia: sigue creyendo que existe alguna suerte de Reyes Magos que traen regalos si les escribes una carta diciendo que te has portado bien. El país está quedando como un erial. Como cada vez se parecen más a un erial la memoria, la dignidad, la autonomía personal y colectiva… la educación.
El perroflauta supone que también la Consejera aragonesa de Educación se irá (si no se ha ido ya) de vacaciones, pero él estará allí, haga calor, llueva o granice. Hasta que el cuerpo aguante. Sin ir más lejos, hoy el perroflauta se ha dado cuenta de que se le iba acabando la batería, y se ha ido a descansar a las 12,15 de ese portal, ya tan familiar, por el que se adentra hasta el domicilio de la señora Serrat.
Hasta mañana

domingo, 28 de julio de 2013

Cómo conseguir cambiar este país

Publicado hoy en El Periódico de Aragón
Muchos dicen: “este país es una mierda, está lleno de corruptos, y no tiene remedio porque nadie hace nada”. Cuando explicaba en Bachillerato algunas teorías modernas sobre el origen de la sociedad, tal como la conocemos, y el contrato social que supuestamente estructuró esta forma la sociedad, salían a la palestra (la pizarra y el clima de la clase) Thomas Hobbes y J.J. Rousseau. En líneas generales, el primero viene a decir que el hombre es un lobo para el hombre, en un mundo de violencia y rapiña, donde prima la ley del más fuerte, que siempre intenta ganar y dominar, por lo que los menos fuertes se agruparon en sociedades para defenderse del fuerte, instituyendo así policía y ejército para la defensa de  la propiedad y del orden. Para Hobbes, pues, es un principio indiscutible que o pisas o te pisan. Para Rousseau, en cambio, nacemos buenos y con tendencias naturales a la cooperación, a la justicia y la solidaridad, pero la sociedad puede corromper esa naturaleza buena original de cada uno, pues está estructurada en términos de desigualdades y desequilibrios sociales. Cada curso se montaba en clase une encendida discusión, donde generalmente Hobbes conseguía más adeptos que Rousseau.
Nos educan desde niños en la necesidad de defendernos de los supuestamente más fuertes (a los que se teme y envidia a la vez), de salir vencedores en la carrera de la competitividad, de subirnos al carro de los ganadores y los fuertes, aunque con la boca pequeña nos dicen que hemos de ser buenos, sinceros y solidarios.
Muchos dicen: “este país es una mierda, está lleno de corruptos, y no tiene remedio porque nadie hace nada”. Y en el mismo saco suelen quedar metidos rojos, azules, amarillos, conservadores, anarquistas, comunistas, socialistas, fascistas, políticos, jueces, apolíticos, ladrones, asaltantes, timadores, estafadores, banqueros, empresarios, sindicalistas, etc. En ese mismo saco, suele quedar igualmente metida media población, a la que se le atribuye el egoísmo puro y duro, el deseo de enriquecerse a toda costa y el arte de engañar al personal. En ese saco, pues, están metidos carpinteros, constructores, fontaneros, comerciantes, periodistas, tenderos, dueños de bares y restaurantes, abogados, taxistas, médicos, trabajadores por cuenta propia o ajena, desempleados, alumnos, profesores y un sinfín más  de personas y profesionales. “Todos son unos chorizos”, suele decirse, lo cual parece dar permiso para poder hacer lo mismo si se tuviere oportunidad o para quedarse cruzado de brazos, con la conciencia de estar cargado de razón y ser una víctima más de la sociedad.
Echo de menos, sin embargo, que esa gente me dijera por dónde puede continuar el camino, una vez criticada a conciencia la charcutería universal de chorizos y mangantes. Pero eso ya no le convendría al poder que controla los medios audiovisuales y las redes educativas de un país. Al poder le conviene que un país entero ensordezca de la algarabía que sus habitantes arman cada día criticando a los demás desaforadamente, sin hacer nada y sin proponer otra alternativa a cambio.
En realidad, todo mejoraría realmente si tuviéramos conciencia de que eso llamado “país” existe ante todo y sobre todo en cada uno de nosotros. Estoy convencido de que la inmensa mayoría de la ciudadanía es buena y quiere ante todo y sobre todo vivir en un mundo de paz, libertad, justicia, igualdad, distribución equitativa de los recursos existentes, solidaridad y autonomía. Si cada uno se atreviese a decir públicamente que quiere un país así, y que cada día se esforzará por llevar a cabo el país que lleva dentro de sí mismo, caeríamos en la cuenta de que somos la inmensa mayoría, por mucho que desde el poder se intente inocular diariamente el miedo, la desesperanza y la desconfianza.
Para cambiar el mundo no hay que hacer cosas extraordinarias, sino solo librarnos de prejuicios y tópicos, de excusas y dilaciones, y empezar a construir desde dentro el mundo que se deseamos. Millones de personas unidas podemos mucho más que todas los bancos, multinacionales, ejércitos e instituciones dedicadas a cualquier modalidad de lavado de cerebro. Millones de personas unidas con un mismo objetivo y por unos mismos derechos y valores quizá  tenemos poco interés informativo, pero logramos alcanzar así de nuestra verdadera dimensión y nuestro auténtico tamaño como seres humanos, como seres honestos y coherentes, felices y cabales. Cada una de esos millones de personas descubre un espacio interior ético, que constituye su máxima fuente de energía y ofrece momentos sosegados e intensos de  esperanza y felicidad.
Estoy plenamente convencido de que la inmensa mayoría de carpinteros, constructores, periodistas, fontaneros, abogados, comerciantes, tenderos, dueños de bares y restaurantes, médicos, taxistas, trabajadores por cuenta propia o ajena, desempleados, alumnos, profesores y un sinfín más de personas y profesionales somos buena gente y queremos vivir entre buena gente. Manos, pues, a la obra.

sábado, 27 de julio de 2013

Lloro (y también canto)


Lloro. El Ministerio de Defensa  vuelve a conseguir otro crédito extraordinario (877,33 millones) para poder pagar facturas a los acreedores (entre ellos, las empresas dirigidas hasta anteayer por el actual Ministro de Defensa) por un programa de armas inútil por los cuatro costados.
Lloro. Veo cada día a desharrapados, desahuciados, perroflautas, mendigos, manteros y multitud de ciudadanas y ciudadanos cada vez más atemorizados y empobrecidos. “No hay dinero”, dicen desde los distintos Gobiernos, pero han salido de las arcas públicas 30.000 millones, para que nuestros soldaditos puedan jugar a la guerra con sus juguetes caros y sofisticadas, en lugar de volver a pensar en la unidad y la salvación de la Patria.
Lloro. Más de la mitad de la cantidad total está destinado al pago del avión de combate EF-2000 (¿pero cuándo dejarán de querer combatir y guerrear?), otro 20% a buques y otro 20% más a helicópteros). 8.000 millones de presupuesto para Defensa (¿Defensa? ¿Pero quién nos ataca o quiere atacarnos?). La institución más inútil como Ministerio de la Guerra (hablemos sin eufemismos) mientras corre la sangre, el sudor y las lágrimas de todos los parados, los desahuciados, los pensionistas, los dependientes, los trabajadores con contratos y sueldos de mierda.
Lloro. 767 millones (más otros muchos millones maquillados a través de otros ministerios y partidas) en 2012 para misiones militares en el exterior. (¿por qué no vuelven? ¿Qué hacen allí? ¿En Afganistán, por ejemplo?). Si quedan soldados, transfórmeselos en personal sanitario, de extinción de incendios o de salvamento. No necesitamos soldados. Si USA quiere, nadie nos agredirá. Si USA quiere, quedaremos pulverizados en unos minutos sin que los jefes se muevan de sus despachos, observando como nos llueven misiles desde sus bases y submarinos. Ni un euro en armamento. Ni una persona en armas. Ni un arma más. Necesitamos solo escuelas, hospitales, servicios públicos, residencias, infraestructuras. Y necesitan todo eso y con mucha más urgencia en otras muchas partes del mundo. 0,7% del PIB, Tasa Tobin, etc…. Todo, menos armas y soldados.
Lloro. Al portavoz del Grupo Socialista, Diego López Garrido, no le gusta que el Gobierno de Rajoy haya aprobado este aumento de gasto militar “con nocturnidad y alevosía” (=por decreto ley). En otras palabras, los socialistas se van por las ramas sin entrar en la cuestión que realmente es el problema. Los socialistas hicieron lo mismo, piensan lo mismo y llevarán a cabo lo mismo. ¿He de recordarles quién fue y qué hizo la socialista Rosa Luxemburgo en el umbral de la I Guerra Mundial? Dan pena y lástima también estos socialistas.
Lloro…

Y canto

Imagine there's no Heaven
It's easy if you try
And no Hell below us
Above us only sky

Imagine all the people
Living for today
Imagine there's no country
It isn't hard to do

Nothing to kill or die for
And no religion too
Imagine all the people
Living life in peace

You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you will join us
And the world will be as one

Imagine no posessions
I wonder if you can
No need for greed or hunger
Or Brotherhood of Man

Imagine all the people
Sharing all the world
You may say that I'm a dreamer
But I'm not the only one

I hope someday you will join us
And the world will be as one

El malhumorado humor de los dioses


Realmente, real


viernes, 26 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 41



El perroflauta ha estado toda la mañana en un proceso constante de metamorfosis y transformaciones. Durante el proceso  ha saludado a muchas personas, entre ellas Fernando, ex colega de Instituto, y  Nelu, tocador rumano de cítara por calles y locales. Nelu le ha contado al perroflauta que está enfermo de amor, de tan enamorado que está de su mujer. Le ha prometido que le tocará otro día ”El tercer hombre” de Anton Karas, de la banda sonora de la película del mismo nombre. Pero debe tener cuidado, pues corre el riesgo de pagar una multa de 60 euros o que la policía le requise la cítara. Por si la queréis escuchar ahora:
Nietzsche ha ido acompañando tranquilamente al perroflauta  en cada una de las tres transformaciones por las que ha pasado, y el espíritu del perroflauta ha ido convirtiéndose así en camello, y el camello en león, y el león, por fin, en niño. “Escribe después esto en tu Diario”, le ha aconsejado Nietzsche, y el perroflauta se ha limitado a asentir después con la cabeza.
Camello se ha hecho el perroflauta a fin de soportar cosas pesadas, incluso las más pesadas de todas, para su espíritu. “¿Qué es pesado?”, preguntó el perroflauta, mientras se encorvaba para que se le pudiera cargar bien, a la vez que su fortaleza se regocijaba.  “¿Quizá humillarse”, prosiguió preguntando el perroflauta, “para hacer daño a la propia soberbia? ¿Hacer brillar la propia estulticia para burlarse de la propia sabiduría? ¿Acaso alimentarse de las bellotas y de la hierba del conocimiento y sufrir hambre en el alma por amor a la verdad? ¿O estar enfermo y enviar a paseo a los consoladores, y hacer amistad con sordos, que nunca oyen lo que quieres? ¿Quizá tender la mano al fantasma cuando quiere causarnos miedo? ¿Insinúas que con toda esa carga he de correr por el desierto, ir a mi desierto?”
Y Nietzsche respondió al perroflauta: “En león vas a transformarte ahora y aquí, en el portal de la Consejera de Educación de esta tierra, si es que quieres conquistar tu libertad y ser señor de y en tu propio desierto. Reconoce a tu adversario, perroflauta, reconoce al gran dragón. Mira sin miedo al gran dragón al que no quieres seguir llamando señor ni dios. Su nombre es tú debes. Ahora ya te llamas también yo quiero. Tú debes te cierra el paso, en cada una de sus escamas brilla como oro la inscripción “¡Tú debes!”. El gran dragón pretende convencerte de que todos los valores han sido ya creados y de que no está permitido que haya ningún ¡Yo quiero!. Así habla el dragón, perroflauta”, dijo Nietzsche.
El perroflauta se quedó pensando que, tras convertirse en camello, una bestia de carga, que renuncia a todo y es respetuosa, como león podía ya crear valores nuevos, crearse libertad para un nuevo crear, oponerse con un feroz NO al respeto absoluto y a la obediencia ciega al deber y a la ley. El esfuerzo había merecido la pena: ya se había transformado en león.
“Pero dime, perroflauta,” –dijo Nietzsche, interrumpiendo sus pensamientos,    “¿qué es capaz de hacer el niño que ni siquiera el león puede hacer? ¿Por qué el león tiene que convertirse todavía en niño? Un niño vive y juega por encima de las reglas y las convenciones, él es capaz de inventar y crear sus propias reglas, normas y valores. Inocencia es el niño, un nuevo comienzo, un juego, una rueda que se mueve por sí misma, un primer movimiento, un incondicional decir Sí, perroflauta.  Para el juego del crear se precisa un inocente decir SÍ: quiere, ama, desea, lucha, espera, sueña, rompe, haz lo que quieres porque solo en eso consiste lo que debes. Haz caso, perroflauta. Permanece siempre, así, convertido en niño”.
Tres transformaciones del perroflauta han acaecido esta mañana en el portal de la Consejera. Su espíritu se convirtió en camello, y el camello en león, y el león, por fin, en niño.

Hasta el lunes. Novena semana ya consecutiva en el portal de la Consejera de Educación, Dolores Serrat,  del Gobierno de Aragón, presidido por Luisa Fernanda Rudi.


jueves, 25 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 40

 Hoy el calor ha sido tremendo. Zaragoza ha dado la máxima de todo el país. Había que resistir como fuera. El perroflauta ha escuchado nada más empezar Also sprach Zaratustra, de Richard Strauss. La tercera Sección se titula “El gran anhelo” (Von der großen Sehnsucht), y llega especialmente muy adentro. Por si a alguien le apetece escuchar ahora este poema sinfónico:


El perroflauta también ha estado bien acompañado y ha podido disfrutar de sabrosas conversaciones, además de la presencia de su hermano Guillermo, venido de Murcia. Aquí va una foto:


Mención especial merece Maribel, de Badalona. Al levantarse, el perroflauta ha leído el siguiente correo:

Hola Antonio,
Hace unos meses que entré en tu blog y voy leyendo el Diario de un perroflauta motorizado.
Me gustaría saludarte en Zaragoza. Es muy tarde y no sé si dará tiempo a que leas este mensaje.
Mañana salgo de vacaciones y paso por Zaragoza al mediodía más o menos. No sé exactamente hasta que hora estás en la calle Alfonso I. Pasaré de todas formas. Si lo lees y me puedes contestar, te lo agradecería.
Muchas gracias y un abrazo.

Y casi levantando el campamento y guardando los bártulos, el perroflauta ha podido saludar a Maribel y hacerse una fotografía con ella. 

Ha sido una jornada gloriosa gracias a Maribel, y también a su marido, dando vueltas por la ciudad hasta que Maribel diese con la calle y el portal donde estaba el perroflauta y sus compañer@s. 

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Mira por donde, este blog es seguido en Badalona y vete a saber dónde más.
¡Qué bien!
Hasta mañana

miércoles, 24 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 39


Hoy, día inmensamente plano. He pasado una parte de la mañana con tres naranjas que Prokófiev me ha regalado con amor, aunque no soy un príncipe ni falta que me hace. Y mucha gente y mucho calor en la calle Alfonso repleta de turistas, buscavidas, encorbatados con cartera, abuelos con nietos en sillita y algún que otro perroflauta. Algunos inquilinos del portal donde vive la Consejera saludan cordialmente y comentan cosillas con el perroflauta.
Una anécdota:
-                Esto que usted hace no está nada de bien –espeta al perroflauta un señor de bigote encanecido.
-                Hay tres clases de personas –responde el perroflauta- respecto de lo que usted comenta: las que les parece bien, las que les parece mal y las que se quedan indiferentes. Usted pertenece a la segunda clase.

Y el señor del bigote encanecido, algo perplejo, se va por donde había venido. Mi perro le despide con un  cordial ladrido.

Me limito hoy a transcribir mi artículo “El perroflauta y la Consejera”, publicado hoy en El Periódico de Aragón:


El perroflauta y la Consejera

Desde hace dos meses, cada mañana un perroflauta motorizado canta serenatas a la Consejera aragonesa de Educación, María Dolores Serrat Moré, con la esperanza de que asimile sus reivindicaciones por la escuela pública y contra los recortes perpetrados por su Consejería en educación. El perroflauta imagina que a la Consejera no le debe de hacer ninguna gracia que su destemplado canto perturbe la tranquilidad de sus balcones, pero, aun consciente de sus limitaciones como juglar, el perroflauta motorizado le canta cada mañana, mientras acaricia a su chucho y repara su agrietada flauta, tristes historias sobre cómo va deteriorándose la educación pública en la Comunidad Autónoma de Aragón.
Policías uniformados y de paisano lo visitan regularmente y, olvidadizos ellos, le vuelven a pedir una y otra vez que se identifique. Algunos le dicen que eso no son formas, a lo que el perroflauta responde que si le indican alguna otra vía efectiva de reivindicación y denuncia, se va de allí de inmediato. Otros le preguntan hasta cuándo va a estar allí, y entonces el perroflauta motorizado les asegura que en invierno se abrigará lo suficiente para que el helor de la calle Alfonso no deje aún más maltrecha su circulación arterial. Palabras de comprensión recibe el perroflauta motorizado de buena parte de esos policías, pero no les hace caso cuando le recomiendan abandonar el lugar, pues, de hacerlo, le costaría mucho conciliar el sueño por la noche con la que está cayendo.
Por ejemplo, unos 2.000 docentes interinos de la red pública de enseñanza en Aragón (42.000 en toda España) se han quedado sin trabajo, sin sueldo y con la incertidumbre de no saber si tendrán trabajo en septiembre, cosa que no ocurre con los contratados de la concertada y con el profesorado de Religión. Hay quien piensa que el perroflauta motorizado está acosando a la Consejera en el ámbito de su personal intimidad, pero el verdadero acoso lo sufre ese profesorado interino en sus condiciones personales, familiares y profesionales tan deplorables por obra y gracia de la Consejera Serrat, de la Presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, del ministro José Ignacio Wert, del Presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y principalmente de los amos de todos y cada uno de los anteriores: la Troika y quienes mueven sus hilos y se benefician de sus medidas.
Educación nada tiene que ver con recortar becas de comedor y de libros y material escolar. Y es prostituir la palabra “educación” que un ministerio o una Consejería usurpen ese nombre para subir salvajemente tasas, denegar 40.000 becas universitarias más que el curso anterior e impedir de facto que decenas de miles de jóvenes puedan seguir cursando sus estudios. Tras tanta lamentación tartufista sobre el abandono escolar en España, ¿acaso no se está provocando así un abandono escolar mucho más criminal?
Hay muchas cosas por las que luchar, vivir y morir: la salud, la educación, la atención al dependiente, el merecido descanso del jubilado, la vida y la muerte dignas… La ciudad y el país entero deberían estar llenos de Consejeros y Consejeras convertidos en perroflautas protestando cada día en los bancos, en las Cajas, en las Delegaciones del Gobierno, en las casas donde viven sus dueños que les echan sobradamente de comer.
La Consejera aragonesa de Educación debería encabezar los movimientos reivindicativos por una educación libre, crítica y democrática, es decir, por una escuela pública de toda la ciudadanía y para toda la ciudadanía. De lo contrario, podría decirse que es una excelente Consejera de su Partido y del dedo que la nombró, pero también una pésima Consejera de Educación.
España ha estado durante muchos siglos vigilada por el irracional “nihil obstat” de la jerarquía católica. Cuando, por ejemplo, en la II República osaron poner las cosas en su sitio en materia de educación y de impuestos, el catolicismo se alineó marcialmente con los sublevados por Dios y por España. No es casual que la escuela fuese el centro de su represión y su propaganda a fin de tener sujetas las mentes del pueblo, cuanto más ignorante, mejor, salvo las élites, educadas en colegios religiosos de pago. Por eso mismo no es casual la LOMCE del PP y Wert, que apuntala el adoctrinamiento religioso y la memorización mecánica de contenidos, pero desmantela el verdadero pensar y el verdadero aprender. La iglesia católica, por supuesto, encantada.
Siendo la educación el vehículo por antonomasia para hacer una sociedad y un mundo más humano, libre, justo, sostenible y solidario, poco es tan deshumanizador como unos cicateros recortes en personal, infraestructuras, recursos y servicios básicos en educación.
Por eso el perroflauta motorizado lleva dos meses recordando en silencio y cívicamente a la Consejera aragonesa de Educación la necesidad de una escuela pública, laica y de calidad, donde impere el principio de la absoluta igualdad de oportunidades, y donde se impartan saberes y valores universales, y no creencias.





El perroflauta y la Consejera

 Publicado hoy en El Periódico de Aragón




Desde hace dos meses, cada mañana un perroflauta motorizado canta serenatas a la Consejera aragonesa de Educación, María Dolores Serrat Moré, con la esperanza de que asimile sus reivindicaciones por la escuela pública y contra los recortes perpetrados por su Consejería en educación. El perroflauta imagina que a la Consejera no le debe de hacer ninguna gracia que su destemplado canto perturbe la tranquilidad de sus balcones, pero, aun consciente de sus limitaciones como juglar, el perroflauta motorizado le canta cada mañana, mientras acaricia a su chucho y repara su agrietada flauta, tristes historias sobre cómo va deteriorándose la educación pública en la Comunidad Autónoma de Aragón.
Policías uniformados y de paisano lo visitan regularmente y, olvidadizos ellos, le vuelven a pedir una y otra vez que se identifique. Algunos le dicen que eso no son formas, a lo que el perroflauta responde que si le indican alguna otra vía efectiva de reivindicación y denuncia, se va de allí de inmediato. Otros le preguntan hasta cuándo va a estar allí, y entonces el perroflauta motorizado les asegura que en invierno se abrigará lo suficiente para que el helor de la calle Alfonso no deje aún más maltrecha su circulación arterial. Palabras de comprensión recibe el perroflauta motorizado de buena parte de esos policías, pero no les hace caso cuando le recomiendan abandonar el lugar, pues, de hacerlo, le costaría mucho conciliar el sueño por la noche con la que está cayendo.
Por ejemplo, unos 2.000 docentes interinos de la red pública de enseñanza en Aragón (42.000 en toda España) se han quedado sin trabajo, sin sueldo y con la incertidumbre de no saber si tendrán trabajo en septiembre, cosa que no ocurre con los contratados de la concertada y con el profesorado de Religión. Hay quien piensa que el perroflauta motorizado está acosando a la Consejera en el ámbito de su personal intimidad, pero el verdadero acoso lo sufre ese profesorado interino en sus condiciones personales, familiares y profesionales tan deplorables por obra y gracia de la Consejera Serrat, de la Presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, del ministro José Ignacio Wert, del Presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y principalmente de los amos de todos y cada uno de los anteriores: la Troika y quienes mueven sus hilos y se benefician de sus medidas.
Educación nada tiene que ver con recortar becas de comedor y de libros y material escolar. Y es prostituir la palabra “educación” que un ministerio o una Consejería usurpen ese nombre para subir salvajemente tasas, denegar 40.000 becas universitarias más que el curso anterior e impedir de facto que decenas de miles de jóvenes puedan seguir cursando sus estudios. Tras tanta lamentación tartufista sobre el abandono escolar en España, ¿acaso no se está provocando así un abandono escolar mucho más criminal?
Hay muchas cosas por las que luchar, vivir y morir: la salud, la educación, la atención al dependiente, el merecido descanso del jubilado, la vida y la muerte dignas… La ciudad y el país entero deberían estar llenos de Consejeros y Consejeras convertidos en perroflautas protestando cada día en los bancos, en las Cajas, en las Delegaciones del Gobierno, en las casas donde viven sus dueños que les echan sobradamente de comer.
La Consejera aragonesa de Educación debería encabezar los movimientos reivindicativos por una educación libre, crítica y democrática, es decir, por una escuela pública de toda la ciudadanía y para toda la ciudadanía. De lo contrario, podría decirse que es una excelente Consejera de su Partido y del dedo que la nombró, pero también una pésima Consejera de Educación.
España ha estado durante muchos siglos vigilada por el irracional “nihil obstat” de la jerarquía católica. Cuando, por ejemplo, en la II República osaron poner las cosas en su sitio en materia de educación y de impuestos, el catolicismo se alineó marcialmente con los sublevados por Dios y por España. No es casual que la escuela fuese el centro de su represión y su propaganda a fin de tener sujetas las mentes del pueblo, cuanto más ignorante, mejor, salvo las élites, educadas en colegios religiosos de pago. Por eso mismo no es casual la LOMCE del PP y Wert, que apuntala el adoctrinamiento religioso y la memorización mecánica de contenidos, pero desmantela el verdadero pensar y el verdadero aprender. La iglesia católica, por supuesto, encantada.
Siendo la educación el vehículo por antonomasia para hacer una sociedad y un mundo más humano, libre, justo, sostenible y solidario, poco es tan deshumanizador como unos cicateros recortes en personal, infraestructuras, recursos y servicios básicos en educación.
Por eso el perroflauta motorizado lleva dos meses recordando en silencio y cívicamente a la Consejera aragonesa de Educación la necesidad de una escuela pública, laica y de calidad, donde impere el principio de la absoluta igualdad de oportunidades, y donde se impartan saberes y valores universales, y no creencias.



martes, 23 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 38


Todas las mañanas, el primer hombre que saluda al perroflauta en la calle Alfonso I de Zaragoza es el encargado de la limpieza de esa vía peatonal, la calle por antonomasia de la ciudad. Hoy el perroflauta ha querido hacerse una foto con él, pero ha recibido la negativa nerviosa por parte del encargado de la limpieza. El perroflauta ha visto miedo en su cara, sobre todo en sus ojos. El perroflauta lo comprende bien. La gente es víctima del virus del miedo y de la desconfianza. (¿Y si se enteran de la foto? ¿Y si me sancionan? ¿Y si me echan? ¿Y si me quedo sin trabajo por dejarme embaucar por este hombre motorizado que a veces he visto rodeado de policías?......). La cara de ese encargado de la limpieza se parecía mucho a la cara de much@s viandantes que pasean cada mañana por allí. Esto es lo que principalmente quiere reseñar el perroflauta. Y lo hace triste, pensando que seguramente ese hombre tiene hijos en la escuela y que le gustaría hacerse esa foto y enseñar esa foto. El perroflauta quisiera darle un abrazo, pero no lo hace, porque ya no se dan abrazos y además sería otra forma de poner en evidencia al hombre que deja tan limpia la calle Alfonso I.
Estamos ya demasiado habituados (incluso casi programados) para esperar que las soluciones vengan llovidas del cielo, sin movernos para no hacernos notar en la foto, sin tener que hacer nada o muy poco por nuestra parte. F. Nietzsche, en cambio, dejó escrita en su obra más conocida Así hablaba Zaratustra una frase memorable, que describe y rechaza este estado de cosas anímico: “¡Si queréis subir a lo alto emplead vuestras propias piernas! ¡No dejéis que os lleven hasta arriba, no os sentéis sobre espaldas y cabezas de otros”.
 Nietzsche indica el único camino que conduce a la meta: andar cada un@ por sí mism@, sin descargar la propia responsabilidad sobre otras personas, renunciar a los cantos de sirena de algunas personas supuestamente dispuestas y dedicadas a llevarnos sobre sus espaldas; es decir, alienándonos de nuestra propia libertad y de nuestra propia conciencia, hasta conseguir que seamos primordialmente consumidores compulsivos, súbditos que dormitan en una siesta perpetua, encargados de la limpieza de una calle dispuestos a tragar carros y carretas con tal de conservar un trabajo precario y mal pagado, ciudadanos que no han superado aún su etapa más inmadura e infantil, que temen ser castigados sin haber hecho nada y esperan, a cambio, que lo que puedan recibir sea un regalo de otros, que se preocupan de su supuesto bienestar, a cambio de sus señas de identidad más fundamentales como seres humanos: su libertad y su autonomía (=su capacidad para regirse por sí mismo y decidir siempre y responsablemente por sí mismos).
El perroflauta no puede andar, ni por sí mismo ni de otra manera. Por eso va motorizado. También por eso ha aprendido a volar. El perroflauta vuela cada mañana al son de músicas maravillosas y coloridos de ensueño. Cuando recibe el auxilio de un hombro amigo, la persona que le presta ayuda se transforma en una prolongación de sí mismo. Y entonces  vuelan los dos, el perroflauta y el otro, aunque este no lo note.
El perroflauta quiere subir a lo alto a pesar de las dificultades y sus limitaciones. Su silla motorizada son sus piernas, su perro y su flauta. No lo lleva nadie hasta arriba, ni necesita espaldas y cabezas donde sentarse. Sube y sube sin despegarse cada mañana del portal de la Consejera.  Ese portal es su trampolín. Ese portal es su mano tendida para que tú y tú y tú y tú (también el encargado de la limpieza de la calle Alfonso I de Zaragoza) voléis juntos con el perroflauta sin despegaros cada mañana de ese portal de la calle Alfonso I de Zaragoza.
Hasta mañana.


lunes, 22 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 37


Ocho semanas ya. Hoy, lunes, 22 de julio, comienza la octava semana consecutiva en el portal de la Consejera aragonesa de Educación. ¡Cómo pasa el tiempo..!
Al poco tiempo de llegar, unos hombres han arreglado a otro a unos pocos metros de distancia para aparecer como mendigo sin cabeza. En otras palabras, un cuenco grande a sus pies para el dinero y su cabeza remetida dentro de una chaqueta grande. Tenía su gracia. He pedido a un chico joven que invitaba a los viandantes a hacerse de Intermon Oxfam que hiciese esta foto:


Ha venido a saludar y animar bastante gente. Me doy cuenta de que poco a poco el mensaje va penetrando y mi figura representa lucha y constancia. “Sigue, no abandones”, vienen a decir mayores y jóvenes, mujeres y hombres. Entre esa gente, deseo resaltar la visita y la honda conversación con Primo, fotógrafo y un hombre entrañable que va pudiendo hacer frente a muchas adversidades. Me han hecho esta foto con él: 


El perroflauta motorizado ha tenido tiempo de estar solo, fecundamente solo. El perroflauta motorizado va aprendiendo bien que hay demasiada gente quieta en el mundo, aparentemente sin turbación o alteración, sin tener o hacer movimiento. Esas personas están quietas y aquietadas, mientras quienes mueven los hilos de este tinglado de marionetas se creen cada vez más ricos y poderosos. El perroflauta motorizado se irritaba con esa gente, pero ahora la comprende y la aprecia, pues cada un@ sobrevive como puede y quiere. La vida siempre es un misterio por desbrozar y el perroflauta motorizado va convirtiéndose en un buen aprendiz del misterio que cada un@ es y representa.
No obstante, el perroflauta motorizado quisiera vivir y convivir con personas inquietas, desearía estar rodeado de personas dispuestas a promover o efectuar algún cambio que mejore el mundo y la vida. Allí, en el corazón de la calle Alfonso de Zaragoza, ahuyentando dudas y desánimos, el perroflauta motorizado quiere inquietar, despojar a todos los hombres y mujeres del mundo de su quieto regocijo por poseer algo, le gustaría mucho perturbar a tod@s hasta que estallasen por dentro de un éxtasis de vida.
La inquietud que el perroflauta motorizado desea no produce malestar, sino un dinámico bienestar que no precisa de andadores, de falsos cobijos llenos de rejas, pues le basta tener las piedras del camino como única almohada y las estrellas como único techo.
El perroflauta motorizado tenía esta mañana la certeza, también ahuyentando hoy dudas y desánimos, de que pensar con la mente, con las manos, con el alma y con el corazón es la esperanza de que otro mundo es posible. A él mismo pensar así le hace latir con fuerza su corazón. Por eso el perroflauta motorizado no sabe ni quiere quedarse quieto, y desea entregar esa esperanza a los inquietos.
Hasta mañana.

viernes, 19 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 36


Viernes, último día de la séptima semana consecutiva en el portal de la Consejera aragonesa de Educación.
El perroflauta observa que va calando el mensaje. Se acercan de variadas edades y formación para decirle que siguen este Diario en su blog. El perroflauta percibe incluso a algunos ilusionados.
Antonio, recién regresado de Cantabria con Ana, viene con su perra nueva y una historia lacerante: su perro de tantos años se les ha muerto en la playa de un infarto. Es de admirar la entereza y la coherencia de esa pareja y les deseo todo lo que tan de largo se merecen. Antonio, el perroflauta y la perra (una mezcla de algo y pastor belga) se han sentido bien durante esos minutos de encuentro.
Una amiga de la madre del perroflauta, Teresa, en pleno torbellino de entropía, se ha acercado también para saludarlo. ¿Qué pasa en la mente y en el corazón de esas mujeres, tan desgastadas, tan dispuestas a seguir viviendo?
Miguel, un profesor jubilado de Utebo, ha explicado al perroflauta sus ideas que imparte en forma de “menoster” (frente a los “master” oficiales) de creatividad. Toda una fuente de iniciativas y trabajo fecundo es Miguel.
Ester, amiga de la hermana del perroflauta, regala unos momentos cargados de vivencias intensas.
Especial ilusión le ha hecho al perroflauta ver (reconocer) a Ismael, ex alumno del IES Félix de Azara, ahora ya abogado, iniciándose en el intrincado mundo del Derecho Penal.
Hacia las 12,15 ha sonado en los auriculares del perroflauta la canción Utopía de Alanis Morissette. Lo ha tomado como un regalo de este viernes con que se cierra una semana difícil para el perroflauta. Es esta:

Estaba recogiendo cárteles y bártulos cuando Joan Manuel Serrat ha tocado su hombro y le ha dicho: “Yo también quiero”. Y ha cantado su canción, también titulada Utopía: 

Gracias por todo, compañeras y compañeros. Un abrazo y hasta el lunes. Ya octava semana...




jueves, 18 de julio de 2013

Diario de un perroflauta motorizado, 35



Piensa el perroflauta que no debería estar allí, apostado ante el portal de la Consejera aragonesa de Educación. Piensa el perroflauta que es la Consejera quien debería estar protestando y escrachando en el portal de su Presidenta de Gobierno, que dice que no hay dineros para educación y para sanidad, por ejemplo, y que por eso hay que seguir recortando. Si la Consejera estuviese donde debiera, en la calle y entre el pueblo estudiantil, universitario, y entre la gente vinculada al deporte y la cultura, el perroflauta no tendría que estar cada mañana en la calle Alfonso I de Zaragoza, peatonal, plena de tiendas de suvenires y guiris, y estar molestando a los policías que le visitan día sí, día no, según decida el señor comisario.
Si al perroflauta le hiciesen encargado de los parques de su ciudad, estaría todos los días visitando parques, tomando nota de sus posibles deterioros y de las sugerencias que la gente de los barrios pudieren hacer para mejorarlos. Si el perroflauta fuese responsable de los jardines y parques de su ciudad, sus conciudadan@s serían sus colaborad@res y compañer@s, no sus adversari@s. El perroflauta no estaría talando árboles, levantando zonas verdes para construir apartamentos de lujo, recortando gastos para zonas verdes. Y si, contra su voluntad, eso ocurriese, iría cada mañana a encadenarse ante algún organismo público en protesta por tanto desmán.
Por eso no entiende el perroflauta a la Consejera de Educación. Educar no es dejar en la calle a miles de docentes de la pública al llegar el verano, ni recortar becas de comedor a unas familias que apenas pueden darle algo de comer a los alumnos de los que debe ocuparse la Consejera, ni recortar becas y subir las tasas universitarias… Hay tantas cosas por las que luchar, vivir y morir: la salud, la educación, la atención al dependiente, el merecido descanso del jubilado, la vida y la muerte dignas… La ciudad y el país entero deberían estar llenos de Consejeros y Consejeras protestando cada día en los bancos, en las Cajas, en las Delegaciones del Gobierno, en las casas donde viven las manos que les echan sobradamente de comer.
La Consejera de Educación debería encabezar todo movimiento reivindicativo de una educación libre, crítica y democrática, es decir de una escuela pública de tod@s y para tod@s. De lo contrario, puede decirse que es una buena Consejera de su Partido y del dedo que la nombró, pero no de Educación. La Consejera aragonesa de Educación es sin duda una excelente Consejera del PP, pero también una pésima Consejera de Educación.
Al perroflauta le va a tocar, pues, estar muchos días más en el portal de la Consejera. A veces el perroflauta piensa que las Consejerías son adjudicadas mediante el método de las bolas de bingo en un saquito, que la Presidente Rudi va sacando al azar o ajustando la suerte a que cada futur@ Consejer@ alcance públicamente y cuanto antes su máximo nivel de incompetencia.
Piensa el perroflauta que a los demás también nos vendría bien un escrache: el propio auto-escrache. El perroflauta cada vez aguanta menos a cuantos se acercan a él para comentar lo mal que va todo porque la culpa lo tienen los políticos. Y ciertamente la tienen, pero también es cierto que todos y cada uno somos responsables de lo que está pasando y de lo que no está pasando, pero debería estar pasando. Cada persona se mira al espejo y sale a la calle pertrechada de decenas de excusas y tópicos para no hacer nada y echar la culpa de todo a los demás. Por eso nos vendría bien un auto-escrache para hacernos reaccionar. El país entero debería explotar de indignación, una vez liberado de tanto cuento y tanta excusa.
Hoy ha venido gente amiga y el perroflauta se ha alegrado mucho de estar con todas esas personas. Entre ellas, Charo, una mujer experimentada y luchadora durante su ya larga existencia, que lo ha hecho compañía durante casi toda la mañana. Y Dalia, ex-alumna del IES Pablo Gargallo, pura vitalidad y corazón, como cuando era adolescente. Y María José, profesora y compañera de sendas hacia una escuela pública mejor. A todas y cada una de esas y otras personas, gracias y un abrazo.
El perroflauta se ha sentido antes, solo, escuchando en el portal de la Consejera el Concierto nº 1 para piano y orquesta de Beethoven.