lunes, 8 de diciembre de 2014

Cuando, finalmente, vengan a por mí y a por ti, ya no quedará nadie para protestar


 A veces aparecen imágenes que semejan pesadillas que creíamos desaparecidas. La portada del ABC es una de ellas: una llave en la cerradura de una prisión y un título: “PODEMOS: la llave para encerrar a los corruptos y a los culpables de la crisis”. En páginas interiores se descubre el verdadero pastel:  “Presos de ETA proponen que se vote a Podemos y no a Amaiur en las generales”, dado que ven a Iglesias como un “compañero de viaje” que acabaría “decretando excarcelaciones masivas”
Acudiendo a unas “fuentes” que escuchan decenas de afirmaciones de etarras encarcelados sobre el asunto, ABC sigue afirmando que una de las primeras medidas que adoptarían Iglesias y Podemos “sería dar un giro de 180 grados a la actual política penitenciaria, lo que propiciaría su acercamiento a cárceles del País Vasco y Navarra. Una medida que anticiparía su pronta puesta en libertad”.
Copio un párrafo más de semejante panfleto (subrayo las palabras que me parecen especialmente expresivas de la mentalidad ultramontana hispanovisigótica y de la manipulación más o menos subliminal del lector:  “Así que la única esperanza que les queda a los terroristas de beneficiarse de amnistías más o menos encubiertas es que las urnas fuercen a Mariano Rajoy a abandonar el Gobierno y conduzcan a Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero o Iñigo Errejón al asalto de La Moncloa. «De puta madre, los resultados han sido un subidón», afirmaba con abierta satisfacción un representante del colectivo de presos tras los resultados obtenidos por Podemos en las elecciones europeas. Y en un tono entre eufórico y cínico añadía: «Todavía hay rojos de verdad en el Estado español»”.
La ultraderecha no se anda con rodeos. Apunta hacia el enemigo que considera más peligroso en cada momento y dispara sin contemplaciones lo que mejor le venga, pues el fin justifica los medios. De hecho, cada día se supera más, pues nada tienen que enviadar sus métodos a los de la fotógrafa y cineasta nazi Helene Bertha Amalie «Leni» Riefenstahl, y sus productos propagandísticos o a los métodos, discursos y planteamientos de, ministro de propaganda de la Alemania nacionalsocialista Paul Joseph Goebbels.
Se trata de una portada más del poder mediático español, poseedor de todo el aparato propagandístico actual en España. Apelan a la libertad de expresión y de opinión, a la vez que machacan y trituran a cuant@s disientan de sus tesis. La Razón, ABC y adláteres son los voceros en formato de prensa de papel de la ultraderecha que ve peligrar el paradisíaco castillo donde moran desde hace siglos. Obispos, banqueros, patriotas defraudadores y blanqueadores, terratenientes, buscavidas venidos a más, gente de bien (vivir), pistoleros si te descuidas…
Hoy es Podemos, pero no decimos nada. Mañana serán otros, y pasado mañana otros… Y no pasa nada de nada… Cuando, finalmente, vengan a por mí y a por ti,  ya no quedará nadie para protestar.


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