Día oficialmente festivo. Frío y algo
despejado. Apetece levantarse más tarde, quedarse en la cama hasta que llame a
gritos un buen desayuno después de una gratificante ducha.
La España nacionalcatólica sigue presente mediante la festividad confesional de hoy. Por eso Marisol y yo hemos
ido hoy al portal. Cantamos cada día el Canto a la Libertad para reivindicar
festivamente que los espacios públicos han de ser de todos y para tod@s, más
allá de las ideas y las convicciones personales, respetables, pero
pertenecientes al ámbito privado. Hoy también lo hemos cantado los dos. Ha sido
emocionante,
Sí, por eso hemos ido también hoy al portal de la vivienda de la
Consejera de Educación del Gobierno de Aragón, la inmaculada consejera que
parece no haberse enterado del estado en que ella y el Gobierno al que
pertenece están dejando al pueblo. Hoy much@s niñ@sy sus familias comen poco y
mal, pasan un frío insufrible, incluso algunas tienen cortada la luz. Yo no me olvido de ell@s,
son ell@s l@s que me dan fuerza y ánimo para ir al portal con indignación y
voluntad firme, a pesar de todos los pesares invernales. Se pueden ir metiendo
sus festividades oficiales de corte confesional donde les quepa. Respeto el
derecho a la libertad religiosa (en el ámbito privado), pero reivindico con
todas mis fuerzas un Estado laico y aconfesional, una escuela pública y laica.
En la calle Alfonso riadas de gente
durante toda la mañana. Ni durante las fiestas del Pilar habíamos visto algo
igual. Ardían nuestros carteles a causa de todas las miradas que han caído
sobre ellos. ¡Bien! ¡Objetivo cumplido!
Para quitarme el frío, llego hasta la
pista central de la disco de la plaza del Pilar, y bailo y bailo… Aparece Ketama,
siempre sonrientes los tres, y cantan la canción que durante la mañana hemos
tarareado varias veces Marisol yo. No me gusta bailar solo. ¿Bailas? ¿Estudias
o trabajas?
Hasta mañana
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