Tras la noche más fría del año, una
mañana de 0 grados al salir de casa y de 0 grados al llegar a casa. Marisol y
el perroflauta motorizado han resistido de principio a fin. Han estado un rato
Laila, estudiante de arquitectura, y Mila, estudiante de filosofía.
Después se han acercado también Antonio, de 15M Derechos Civiles y un marqués poco marqués, aunque así se haga llamar en Facebook.
Después se han acercado también Antonio, de 15M Derechos Civiles y un marqués poco marqués, aunque así se haga llamar en Facebook.
Hoy he publicado en el Periódico de
Aragón Mandela,
un artículo de opinión sobre el líder africano recién fallecido. No es extraño,
pues, que apareciese por allí al poco de llegar, vestido solo una especie de
blusa amplia, por lo que pensé que iba a coger un pasmo en pocos minutos.
- Hola –saluda-, creo que no vendría mal
que aportases estos párrafos de algunos discursos que pronuncié, una vez salido
de la cárcel. Aquí tienes - y le da una hoja escrita a mano por las dos caras.
El perroflauta motorizado lee en
silencio. Esto es lo que Mandela le entregó:
(2004) La paz no es
simplemente la ausencia de conflicto; la paz es la creación de un entorno en el
que todos podamos prosperar, independientemente de raza, color, credo,
religión, sexo, clase, casta o cualquier otra característica social que nos
distinga. La religión, las características étnicas, el idioma y las prácticas
sociales y culturales son elementos que enriquecen la civilización humana, que
se suman a la riqueza de nuestra diversidad. ¿Por qué dejar que se conviertan
en causa de división y de violencia? Estaríamos degradando nuestra humanidad
común, si permitimos que eso ocurra.
(2007)
Mientras la pobreza, la injusticia y la
evidente desigualdad persistan en nuestro mundo, nadie podrá realmente
descansar. Nunca olvidaremos cómo millones de personas en todo el mundo se han
unido a nosotros en solidaridad para luchar contra la injusticia de nuestra
opresión mientras estuvimos en la cárcel. Esos esfuerzos no fueron en vano y
ahora podemos estar aquí y sumarnos a millones en todo el mundo que luchan por
la libertad y contra la pobreza.
La
pobreza masiva y la repugnante desigualdad son terribles flagelos de nuestros
tiempos, tiempos en que el mundo alardea de adelantos impresionantes en ciencia
y tecnología, en la industria y la acumulación de riquezas.
Vivimos
en un mundo en el que los conocimientos y la información han avanzado a pasos
agigantados, sin embargo millones de niños no van a la escuela. Vivimos en un
mundo en el que la pandemia del SIDA pone en peligro el entramado mismo de
nuestras vidas. Pero gastamos más dinero en armas que en garantizar el
tratamiento y el apoyo para millones de personas infectadas con VIH. Es un
mundo de grandes promesas y esperanzas. Pero también es un mundo de desesperanza,
enfermedad y hambre.
La
eliminación de la pobreza no es un gesto de caridad. Es un acto de justicia. Es
la protección de un derecho humano fundamental, el derecho a la dignidad y a
una vida decente. Mientras persista la pobreza, no habrá verdadera libertad.
Las medidas que tienen que adoptar las naciones desarrolladas están claras.
La
primera es garantizar la justicia en el intercambio comercial. He dicho
anteriormente que la justicia en el intercambio comercial es una manera
verdaderamente útil en que los países desarrollados pueden demostrar su
compromiso de lograr que se ponga fin a la pobreza en el mundo. La segunda es
poner fin a la crisis de la deuda de los países pobres. La tercera es prestar
cuanta ayuda sea posible y velar por que esa ayuda sea de la más alta calidad.
Un hombre grande, con una barba
poblada y desaliñada, se planta ante el perroflauta motorizado:
“Hola, soy Ali Primera”, dice nada
más llegar-, bueno, así me llaman, aunque mi nombre es Ely Rafael Primera
Rosell. Soy venezolano, y canto, compongo, hago poemas y lucho por mi pueblo.
Me gustaría mucho dedicarle ahora al Camarada Nelson, aquí presente, esta
canción. ¿Puedo? –pregunta Alí Primera.
-Claro -responde el perroflauta motorizado-
. Adelante.
Hasta mañana
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si lo deseas, puedes hacer el comentario que consideres oportuno.